Tanto
se escribió sobre el amor que se podría llenar volúmenes y volúmenes,
en incansables estanterías de bibliotecas. ¿Pero de donde nació ese
arrebato con respecto al amor?, ¿les gustaría conocer la historia?:
El Amor o Cupido
Hesiodo le hace hijo del Caos y de la Tierra.
Simónides de Marte y Venus.
Alceo de Céfiro y de la Disputa.
Safo de Venus y el Cielo.
Séneca de Venus y de Vulcano.
Otros autores dicen que la Noche puso un huevo, lo empolló, dióle vida al Amor que inmediatamente desplegó sus alas, remontándose sobre el naciente mundo.
Ciceron, -"Naturaleza de los Dioses", dice que el amor es hijo de Jupiter y Venus, y Cupido nació de la Noche y el Erebo.
Los
griegos también diferencian al Amor y a Cupido, llamando al primero
Eros y al segundo Himeros: uno dulce e inspirador de los sabios; otro
violento y loco.
Hímero:
El genio Hímero es la personificación del deseo amoroso. Acompaña a
Eros en el cortejo de Afrodita y, en el Olimpo, vive al lado de las
Cárites y las Musas. -Simple abstracción no figura en ninguna leyenda-.
Eros: Eros es el dios del Amor. En las teogomías mas antiguas, Eros es considerado como un dios nacido a la par que la Tierra
y salido directamente del Caos primitivo, (era adorado en Tespias, en
forma de piedra bruta) O bien nace del huevo original, el huevo
engendrado por la Noche, cuyas dos mitades se separan y forman la Tierra y su cobertura, el Cielo.
Aveces
se le tiene por hijo de Ilitía, de Isis, o de Hermes y Artemis Ctonia, o
bien -y es ésta la tradición más generalmente aceptada- por hijo de
Hermes y Afrodita.
Del
mismo modo que se distinguen varias Afroditas se distinguen tambien
varios Amores: uno sería hijo de Hermes y Afrodita Urania; otro, llamado
Anteros (el "Amor Contrario" o "Reciproco"), habría nacido de Ares y
Afrodita, hija de Zeus y Dione. Un tercer Eros sería hijo de Hermes y
Artemis, hija de Zeus y Perséfone; este es más particularmente el dios
alado, familiar a los poetas y escultores.
Cicerón,
que al final de su tratado "Sobre la naturaleza de los dioses" ha
acumulado estas sutilezas de los mitógrafos, demuestra sin ningún
esfuerzo el carácter artificioso de todos esos mitos, forjados tardíamente para resolver dificultades o contradicciones que encerraban
las leyendas primitivas.
Cupido:
Mit. Dios del Amor, en la mitología romana, que representaba a Eros de
la mitología griega. Hijo de Marte y de Venus, Júpiter, para evitar las
turbulencias que por su inclinación al mal pudiera causar el niño, mandó a
su madre que se deshiciera de él, pero la madre lo ocultó en los
bosques, donde el dios AMOR fue amamantado por la cabra Amaltea. Crecido
ya, se construyó un arco y flechas, y primero se ensayó en los
animales, para luego herir más certeramente los corazones humanos.
Vulcano
le fabricó un carcaj provisto de flechas, unas de oro y muy agudas, que encendían en las almas pasiones indomables, otras de plomo y embotadas,
que dejaban en el corazón un frio glacial que producía la antipatía.
Amaltea: Mit. Cabra que habiendo amamantado a Zeus, fue premiada por el dios colocandola entro los astros.
Nombre
de una ninfa que cuidó del dios, y a quien éste como recompensa le
regaló uno de los cuernos de la cabra nodriza al que concedió el don de
proveer todo cuanto ella deseara. Ese cuerno se designó, por eso, con el
nombre de Cuerno de la Abundancia.
Cornucopia:
(Lat. Cornu, cuerno y copia abundancia) Vaso corniforme, desbordante de
frutas y flores, con que en la antigüedad simbolizábase la abundancia.
Kama:
Divinidad Indica. Amor entre los hindúes. Nombre nuevo al renacer:
Adhoioni. Se lo representa como un papagayo y teniendo en la mano un
arco, cuyas flechas son flores.
La fabula de Psiquis -autor: Apuleyo-
Hubo
una edad remota y en un país cuyo nombre se ignora, un rey que tenía
tres hijas. Las dos mayores se casaron con unos príncipes que las
igualaban en dignidad, y la más joven era tan gran dechado de
perfección, que el pueblo la idolatraba y dio en erigirle templos. Teniéndola por segunda Venus. Esta diosa se irritó contra su rival, y
ordenó a su hijo Cupido que le procurase un amor indigno de sus prendas;
pero en vez de castigarla, Cupido se enamoró de Psiquis apenas la hubo
visto.
Consultado
el oráculo de Apolo sobre la suerte de la joven, contestó que no
esperasen los padres un amor mortal para su hija, sino un dios deforme,
temido de los dioses y del mismo Infierno, y que la expusieran en traje
de boda en cierto monte, al lado de un presipicio. Hecho lo que el
oraculo ordenó, y expuesta en el sitio indicado la cándida Psiquis,
Céfiro la arrebató en un rápido vuelo, depositándola en medio de un
bosque donde había un suntuoso palacio, al parecer deshabitado: -¿Dónde
estoy? - Preguntó la niña no viendo a nadie en las estancias ni en los
jardines. Y una voz misteriosa le murmuró al oído: -"Donde eres amada y
tus deseos se verán todos satisfechos". Y en efecto, como al conjuro de
sus capricho, resonaban concertadas músicas, ofrecíanle atavíos, joyas,
banquetes.... Llegada la noche, acudió el misterioso esposo para ejercer
sus derechos. Psiquis al que esperaba monstruoso, y aunque no lo veía,
sentíalo dulce, enamorado, de bien proporcionadas formas. Cuando el día
iba a venir, él se alejaba para no ser visto. ¿Quien era? ¿Como era? Psiquis le importunaba con súplicas y caricias para que le mostrase cual era, pero él nunca accedía a satisfacer su
natural curiosidad -"¿No somos así felices?- decía. Pues no te
atormentes queriendo saber quien soy; porque en el momento mismo de
conocerme se destruirá nuestra felicidad..." Y sucedió que preocupados
los padres de Psiquis por la suerte de ésta, enviaron a sus dos hermanas
a que la buscasen. El misterioso amado sabia los males que estas dos
mujeres podrían aportar y prohibió a Psiquis que les hablase; pero al
verla muy triste se lo permitió al fin, y Céfiro introdujo a las dos
hermanas en el encantado palacio. Psiquis les contó las dichas que
gozaba, les hizo ricos presentes. Las dos reinas le tuvieron envidia, y
al saber en la segunda visita que no veía a su
esposo, dijéronle que el oráculo délfico había hablado de un monstruo,
de una serpiente acaso que, acabaría por deborarla, si ella no lo mataba
antes.
Aterrada
Psiquis, y no pudiendo comprender por qué se recataba su esposo,
admitió el perfido consejo, y en la callada noche, mientrass él dormía,
se levantó del lecho para empuñar una espada homicida; al instante de
tomar la lámpara observó con asombro que en vez de un monstruo era
Cupido, el Amor mismo, quien a ella se unía. Despechada de haber
confiado de su propia felicidad, quiere volver el acero contra su pecho,
pero se le cae de la mano, y mientras contemplaba embelesada el arco y
el carcaj del dios que están a los pies del lecho, una gota de aceite
cae de la lampara en la espalda de Cupido.... Despierta éste, al verse
sorprendido por ella, levantó vuelo.... Psiquis le detiene por un pie;
pero él sigue volando y la dejó caer en tierra. Al pasar por un ciprés
detiene el vuelo, y desde él la reprende severamente por su
desconfianza, y reanudó su aéreo curso, desaparece pronto....
Pisiquis
se desespera, reniega de sus hermanas que tan mal la han aconsejado, y
no queriendo vivir sin su amor, se arroja a un río. Las linfas la
depositan dulcemente en la orilla; Pan acude a consolarla y le
recomienda que aplaque a Cupido. Errante por el mudo, llega Pisiquis a
casa de una de sus hermanas, y le dice que, para
vengarse el Amor, la ha amenazado con casarse con una de ellas. Movida
por la ilusión de ser ella, huyo del palacio la reina y sube a una roca
creyendo que Céfiro la conducirá como a Psiquis; pero cae al mar y
perece. Psiquis se venga de igual manera de su otra hermana.
Entretanto,
sabiendo Venus que su hijo sufría, buscó a Psiquis para castigarla.
Esta sigue siempre su camino en busca de Cupido, y al llegar cerca de un
templo de Ceres recoge las dispersas espigas del campo para ofrecerlas a
la diosa y que le preste su ayuda, pero ella le contesta que la única
gracia que puede dispensarle es no entregarla a su enemiga; Juno, que
también la encontró implorante en un de sus templos, le respondió de
igual manera. Psiquis no desmaya por eso, de decide a buscar a Venus,
en cuya compañia estará Cupido, y logra encontrarla. Indignada Afrodita
al ver que más que en ella la joven se fijaba en su hijo, sube al Olimpo
e implora al jefe de los dioses que mande a Mercurio traer a Psiquis,
pues ella no ha podido detenerla por habersele presentado en actitud
suplicante. Cuando la ve en su presencia, le rasga las
ropas, le arranca el cabello, le golpea la cabeza, y formando un gran
montón de trigo, cebada, mijo, adormideras, lentejas, habas, y
guisantes, le ordena separar los granos antes de la noche, dándole por
únicas compañeras en su trabajo a la Tristeza y a la Solicitud. Psiquis
no sabía que hacer, pero unas laboriosas hormigas sacáronla del
compromiso separando los granos. Venus le ordenó enseguida que lleve una
vedija de lana dorada de ciertos carneros que pacián a
las márgenes de un río y en lugares inaccesibles. En vez de cumplir la
orden, la joven infeliz quiere arrojarse al río, cuando una misteriosa
canavera empieza a murmurar suaves sones y el indica el camino por donde
podrá llegar hasta la dorada vedija. Venus le prescribe que le lleve un
odre lleno de agua negra que corre de una fuente custodiada por
dragones, y un águila coge el odre, lo llena del agua negre y se lo
presenta a Psiquis. La implacable enemiga deplora haber perdido parte su
sus gracias sufriendo por una enfermedad de Cupido, en impone a Psiquis
que baje a la Infiernos
a pedir a Proserpina que le preste una caja de sus afeites. Psiquis
quiere otra vez darse muerte arrojándose desde una torre, cuando una voz secreta le dice que el camino de la región sombría está por el Tenaro, cerca de Lacedonia; pero que debía llevar
una torta en cada mano y dos monedas en la boca, dando una de estás a
Carón para que la pasara en su barca, y una torta a Cerbero para que la
dejase entrar en la Corte de Proserpina. Dentro ya, sería acogida benignamente,
más debia rehusar el banquete a que Proserpina la convidaría,
limitandose a tomar asiento en el suelo y a comer pan moreno. Hecho lo
que la voz le aconsejaba, recibió de Proserpina la caja deseada; pero al
salir del Infierno, la curiosidad la tentó, y quiso ver lo que había
dentro, para reservarse una parte que aumentase sus propias gracias....
¡Desdichada! Dentro solo había un vapor infernal y soporífero que la
hizo caer aletargada, y no habría recobrado el conocimiento si Cupido,
huyendo por una ventana del palacio de su madre, no acudiera
devolvíendole el sentido con la punta de una
flecha y encerrando en una caja los negros vapores huídos. Cupido voló
en seguida al Olimpo para rogar al Tonante que le consinstiese vivir con
su amante Psiquis: Júpiter consintió, y llamando a ésta, le hizo beber
la ambrosía, con que advino inmortal y, en presencia de todos los
dioses, se celebraron sus nupcias con Cupido. Poco tiempo después la
dichosa Psiquis dio a luz una niña que recibió el nombre de
Voluptuosidad, y presidipo a los placeres de los sentidos.
Hablando
de estos amores, escribe Carrasco en su "Mitología Universal": "La idea
primera de la fábula de Psiquis está basadaa en dos alegorias: la
belleza del alma, rival de la del cuerpo, inspira el amor más tierno y
vivo; la curiosidad temeraría que trata de profundizar los misterios de
más allá de los limites de la naturaleza humana, queriendo descorrer un
velo, se vuelve funesta para los que ceden a sus inspiraciones.
Anteros: Hermano y compañero de Cupido era Anteros (ante-Eros), que significa amor recíproco. Dicen los escritores antiguos que lamentándose Venus de que su hijo el Amor siempre fuese niño, le respondió Temis
que no crecería mientras la madre no le diese otro hermano que le
pudiese amar. Entonses nació Anteros, en cuya compañía empezó Cupido a
crecer; pero apenas aquél se alejaba, éste se transformaba otra vez en
niño: graciosa manera de dar a entender que el amor acaba por
extinguirse si no es correspondido por otra persona.
Los
poetas han dado muchas denominaciones a Cupido: Mago, Sofista; Tirano,
porque exige ser correspondido; Gémino, porque habita en el cielo y en
la tierra; Ocúleo, porque tiene sus origen en la vista; Pandemos, porque
lo domina todo; Fotos, e Himeros, por el deseo que inspira....
Cuando
se ve coronado de rosas indica efímeros deleites. En su aljaba tiene
dos clases de flechas: unas de oro, que al herir producen el amor
verdadero, y otras con punta de plomo que inspiran odio y
aborrecimiento.
¿El amor se aloja en el corazón?
Berowne
(Aparte).- He aquí la obra del hígado(1), que hace de la carne una
sustancia divina y de la joven oca una deidad. ¡Pura, pura idolatría!
¡Dios nos corrija! Desbarramos.
-"A buen fin no hay mal principio", trabajos de Amor perdidos. W. Shakespeare. -
(1)Desde los más remotos tiempos era considerado el hígado como el órgano en que residía el amor. En "The rape of Lucretia",
en "Mucho ruido y pocas nueces", etc. localiza Shakespeare en el
higado, conforme a las ideas antiguas, los afectos amorosos, y no en el
corazón. En la celebérima oda XXXIII de Anacreonte se alla el siguiente
pasaje, en dimetros gámbicos catalépticos puros a base anapéstica,
cuando llega el Amor empapado de lluvia con alas, aljaba y ballesta, y
vate le calienta las manos junto al hogar: -Vertida por nosotros la obra
integra del poeta teyano, podemos ofrecerle la siguiente traducción en
el mismo metro del original:-
<este arco, por si la lluvia
ha dañado algo dus fibras.>>
Y lo tiene, y como un tábano
me hiere en medio del hígado.
Otros datos:
Los
Chamanes de Cochinchina comoen el hígado de los enemigos muertos en
combate, creyendo que el hígado es la sede del valor, que así se
transmitirá a ellos. -Sociología. W.F.Ogburn y M.F.Nimkoff, "El
individuo y la cultura 3-2"-
Esto es algo que pude averiguar acerca del amor:
(...) Mi amado es blanco y rubio, señalado entre diezmil:
Su cabeza, como oro fino, sus cabellos crespos negros como el cuervo.
Sus ojos, como de palomas junto a los arroyos de las aguas, que se lavan con leche, y a la perfección colocados.
Sus mejillas, como una era de especias aromáticas, como fragantes flores; sus labios, como lirios que destilan mirra que trasciende.
Sus manos, como anillos de oro engastados de jacintos; su vientre, como claro marfil cubierto de zafiros.
Sus pernas, como columnas de mármol fundadas sobre basas de fino oro; su aspecto, como el Libano, escogido, como los cedros.
Su
paladar, dulcísimo: y todo él codiciable. Tal es mi amado, tal es mi
compañero, oh doncellas del Jerusalén... -"El cantar de los cantares" de
Salomon-
"He amado cada día, como si el ser amado estuviera a punto de morir. Como si yo fuera a morir mañana..."
-Anaïs Nin, "Diario II (1934-1939)-
Recetas:
LECHE DE CUPIDO
(ensalada de los bosques de Amaltea)
Ingredientes para dos amantes:
-200gs. queso feta o mozarella
-8 frutillas (limpias)
-1 pomelo (pelado)
- hojas y flores de taco de reina (diez y diez)
vinagreta:
-sal y pimienta a gusto.
-1 cucharada de miel (si es de tomillo mejor)
-1 cucharada de mostaza (tipo Dijon)
-1 cucharada de vinagre de frambuesas
-1 cucharada de whisky
-1 cucharadita de jugo de cebolla
-2 cucharadas de crema de leche
-4 cucharadas de aceite de oliva
Lavar
bien la hojas y flores de taco de reina. Cortar las frutillas -limpias-
en laminas. Pelar y despellejar el pomelo en gajos. Hacer una vinagreta
con todos los ingredientes colocando en el mismo orden y macerar las
frutas unos minutos en él. Cortar el queso en finas tranchas. Colar las
frutas e intercalar en un plato con el queso. Remojar las hojas y flores
en la vinagreta y decorar con ellas el plato. Salsear el plato con la
vinagreta. -Servir con un buen champagne brut-
(...)"El placer del amor es mucho mayor que el de la aventura..." -Anaïs Nin-
(...) -Tienes que amarme. Soy el Loco ese que dices.
Yo soy el Adán nuevo que come al viejo hombre,
Tu Roma, tu Esparta, tu Sodoma,
como un pobre arrojado entre manjares torpes.
Y mi amor es el fuego que devora constante
tus carnes insensatas y que, como un perfume,
se evapora.- "Sagesse". Paul Verlaine-
ALIMENTO DE EROS
(suprema de pollo con frutos del bosque y pure de castañas)
Ingredientes para dos amantes:
-2 supremas de pollo(sin piel)
-1 cucharada de manteca
-1 cucharada de miel
-1 cucharada de mostaza
-1 vaso de vino blanco -seco-
-1 cucharada de maicena
-1/2 cucharadita de curry picante
-sal y pimienta a gusto.
Varios:
-6 frutillas
-10 frambuesas
-6 cerezas
-20 arandamos
-10 moras o cherris
-1 kiwi
-1 durazno
-1 pera
-2 cucharadas de pasas de uvas verdes y morenas remojadas en vino blanco.
-1 cucharada de pistachos partidos
-2 cucharadas de almendras molidas grueso.
-1 cucharada de piñones
-1a2 gotas de esencia de rosas
-Los pétalos de una rosa roja
-10 violetas
-6 flores de albahaca
-6 flores de romero
-hojas de albahaca para decorar
Guarnición:
-Pure hecho con 1/2 kg. de castañas, (puede reemplazarse con puré de batatas)
Dorar
en una sarten las supremas en manteca de ambos lados. Sasonar con sal,
pimienta y curry. Agregar la miel y la mostaza, incorporar el vino
blanco y dejar evaporar un poco. Cocinar unos ocho minutos -si hace
falta agregar más vino, no debe secarse-. Incorporar las frutas enteras
menos el kiwi, durazno y pera que sean cortados en gajos. La esencia de
rosa, las almendras, pistacho y piñones. Cocinar un minuto más.
Incorporar la maicena disuelta en un poco de agua fria, revolver hasta
que espece.
Servir con una guarnición de pure de castañas o batatas, y decorarlo con las flores y hojas.
(...) Oh carne , carne mía, mujer que amé y perdí,
a tí en esta hora húmeda, evoco y hago canto.
Como un vaso albergaste la infinita ternura,
y el infinito olvido te trizo como a un vaso.
Era la sed y el hambre, y tú fuiste la fruta.
Era el duelo y las ruinas, y tú fuiste el milagro.
Ah mujer, no sé como pudiste contenerme
en la tierra de tu alma, y en la cruz de tus brazos!
Mi deseo de ti fue el más terrible y corto,}
el más revuelto y ebrio, el más tirante y ávido.
Cementerio de besos, aun hay fuego en tus tumbas.
aún los racimos arden picoteados de pájaros.
Oh la boca mordida, oh los besados miembros,
oh los hambrientos dientes, oh los cuerpos trenzados.
Oh la cópula loca de esperanza y esfuerzo
en que nos anudamos y nos desesperamos.
Y la ternura, leve como el agua y la harina.
Y la palabra apenas comenzada en los labios.
Ese fue mi destino y en él viajo mi anhelo,
y en él cayo mi anhelo, todo en tí fue naufragio!
CORNUCOPIA DE AMALTEA
(ensalada de frutas y flores envueltas en masa crocante, con dip de cointreau)
Ingredientes para dos amantes:
Cuerno de masa filo con almendras, bañado en miel y esencia de rosas.
Ingredientes:
Ingredientes:
-masa filo
-almendras picadas
-1 taza de miel de abejas
-1a 2 gotas de esencia de rosas
Frutas para relleno:
-6 frutillas
-20 arandamos
-10 moras
-10 frambuesas
-6 ceresas
-1 kiwi
-6 uvas negras
-6 uvas verdes
-1 naranja en gajos
-1 pera pelada y cortada en gajos
-1 durazno pelado y cortado en gajos
-1/2 mamon cortado en pequeños gajos
-1/4 de melon cortado en cuadraditos
Flores:
-10 violetas
-10 manzanillas
-6 rosas enanas
-10 flores de albahaca
Dip al cointreau:
-Crema
inglesa: 3 yemas/ralladura de 1/2 naranja/ 1/4L de leche/ 4 cucharadas
de azucar/ 1/2 taza de crema de leche / 2 cucharadas de Cointreau.
Hojas de menta fresca para decorar.
Procedimiento:
Procedimiento:
Con papel metálico ffabricar un cuerno de la abundancia (Cornucopia) de unos 25 cm con una boca de unos 15 cm y dándole una torción que luego permita retirar la masa de ese molde.
Intercalar
4 o 5 hojas de masa filo pintando entre cada una con manteca derretida y
espolvoreando con almendras molidas. Cortar en tiras de unos 2 a 3 cm.
de ancho e ir forrando los cuernos. Pintar con huevo batido espolvorear
con azucar y llevar a horno mediano hasta que se dore bien. Desmoldar
con cuidado y bañar con miel tibia por dentro.
Rellenar con un poco de crema cada uno y las frutas -limpias, y las grandes cortadas en gajos chicos o cuadraditos- las frutas deberan salir de él generosamente. salsear con el Dip de Cointreau.
Decorar con las flores y hojas.
Si dispone de ello, complete con pequeñas laminas de oro comestible sobre el cuerno.
Dip al Cointreau:
Batir
las yemas con el azucar hasta que se pongan de color amarillo claro.
Calentar a baño maria la leche. Poner la mitad de la leche en las yemas y
batir. Incorporar todo al resto de leche en baño maria y seguir
revolviendo con cuchara de madera hasta que espese. Todo a fuego bajo y
sin que hierva. Cuando la mezcla se pegue al dorso de la cuchara estará
lista. Llevar a un baño inverso -con hielo-. Enfriar e incorporar el
cointreau y la crema de leche semi batida. (Se puede perfumar también
con un poco de vainilla)
(...)
He expidado cruelmente los desdenes que tuve con el amor. Emperador y
dueño absoluto de todos mis pensamientos, me ha castigado con amargos
ayunos y con gemidos de penitencia. He derramado lágrimas por la noche y
exhalado de día dolorosos suspiros. Para vengarse de mi antiguo
desprecio, el amor ha desterrado el sueño de mis ojos, haciéndoles velar
las aflicciones de mis corazón. ¡Oh , gentil Proteo! El amor es
un señor poderoso. Me ha humillado hasta el punto que no hallo
sufrimiento que iguale a sus castigos, aunque no hay placer en la tierra
comparable a la dicha de servirle. Ahora no hablo si no es de amor.
Ahora puedo almorzar, comer, cenar y dormir con sólo el nombre Amor.
-"Los dos hidalgos de Verona". W. Shakespeare.-
¿Te quedó alguna duda con respecto al Amor?....¡Experimentalo!, es la única manera de conocerlo.
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